ALBUQUERQUE - Un juez federal desestimó oficialmente, el lunes, el Acuerdo de Transacción Aprobado por el Tribunal (CASA, por sus siglas en inglés), poniendo fin a más de una década de supervisión federal del Departamento de Policía de Albuquerque (APD, por sus siglas en inglés).
Este fallo histórico se produce después de que la ciudad de Albuquerque y el Departamento de Justicia presentaran una moción conjunta la semana pasada solicitando la aprobación del Tribunal de Distrito de Estados Unidos para rescindir del monitoreo federal, tras el cumplimiento de APD con los términos del acuerdo.
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“Este fallo culmina lo que el departamento y nuestra comunidad han logrado incansablemente durante la última década: hemos recuperado el derecho a dirigir nuestro propio departamento de policía. Desde el primer día, dejé claro que afrontaríamos nuestros retos con decisión, implementando cambios drásticos, construyendo nuevos sistemas y demostrando que el APD puede mantener los más altos estándares por sí solo”, declaró Tim Keller, alcalde de Albuquerque.
Desde 2014, el Departamento de Justicia ha estado supervisando a APD con el objetivo de implementar reformas que cambien la manera en que la agencia: usa la fuerza al responder a incidentes, responde a situaciones de crisis, capacita a los oficiales y rinde cuentas.
La solicitud de la semana pasada argumentaba que APD ya había cumplido con todo esto desde octubre de 2024. A consecuencia, el juez de distrito de EEUU, James O. Browning, tomó la decisión el lunes de ponerle fin a más de una década de supervisión federal.
“Este momento demuestra que la reforma y una actuación policial sólida pueden ir de la mano, y que la confianza, la rendición de cuentas y la seguridad no son valores contrapuestos, sino que están conectados. También marca el comienzo de la próxima generación de nuestro departamento de policía: uno transparente, que reconoce sus errores, se responsabiliza y es plenamente capaz de aprender y continuar las reformas según sea necesario”, agregó Keller.
La administración de la ciudad de Albuquerque informó en un comunicado que tras la conclusión de la supervisión federal, tanto la ciudad como el departamento de policía “reafirman su compromiso de continuar construyendo un departamento de policía moderno y centrado en la comunidad, basado en la actuación policial constitucional y la confianza pública”.